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Mazda CX-30, un SUV de aspecto deportivo, con una mecánica eficiente y un acabado premium

El nuevo Mazda CX-30 es un vehículo encuadrado en el segmento de SUV compacto que con sus 4.395 mm de largo, 1.795 mm de ancho, 1.540 mm de alto y una distancia entre ejes de 2.655 mm, se sitúa entre los modelos CX-3 y CX-5 y está dirigido a conductores que buscan las dimensiones compactas y el carácter urbano del primero, pero con el espacio y la funcionalidad del segundo.

Exteriormente la mitad superior del vehículo tiene la silueta aerodinámica de un coupé, mientras que la parte inferior cuenta con un revestimiento negro que, además de proteger la carrocería, transmite una mayor aspecto de SUV.

En el frontal llama la atención la parrilla en forma de ala característica de Mazda, así como las líneas deportivas y afiladas que ofrece tanto el capó como las ópticas delanteras, mientras que en la saga destacan los pasos de rueda que sobresalen de la parte trasera del habitáculo.

En lo relativo a las llantas de aleación estas pueden ser de 16 o 18 pulgadas.

En el interior del Mazda CX-30 encontramos un puesto de conducción acogedor y cómodo, integrado en un habitáculo despejado y espacioso con materiales de calidad y un diseño minimalista.

El diseño del puesto del conducción ofrece un buen número de reglajes tanto del volante, en altura y longitudinal, como en lo relativo al asiento, incluyendo de serie el reglaje en inclinación de la banqueta de los asientos delanteros.

El salpicadero presenta en la parte superior un voladizo adicional en forma de ala, acabada con costuras y detalles metálicos, mientras que los tres relojes del cuadro de instrumentos y la pantalla central están orientados hacia el conductor facilitando su visibilidad. Hay que destacar la presencia de una pantalla Head Up Display que en todo momento proyecta sobre el parabrisas información de utilidad.

En lo relativo a infoentrentenimiento el Mazda CX-30 cuenta con una amplia pantalla central de 8,8 pulgadas que se maneja de forma sencilla e intuitiva con el mando HMI.

La gama de motores está formada por el motor diésel Skyactiv-D y por los motores de gasolina Skyactiv-G y Skyactiv-X disponibles en versiones de tracción delantera o tracción total y se pueden combinar con una transmisión manual Skyactiv-MT o automática Skyactiv-Drive, ambas de seis velocidades.

Las versiones de gasolina del Mazda CX-30 han adoptado de serie el sistema inteligente Mazda M Hybrid que utiliza un generador reversible integrado (ISG), accionado por una correa y una batería de ion litio de 24 V aportando un ahorro adicional a través del reciclaje de la energía recuperada durante la deceleración, que se emplea para alimentar el ISG, funcionando como un motor eléctrico, que asiste al motor principal.

El ISG convierte la energía cinética recuperada en electricidad y la almacena en la batería de ion litio. Este sistema utiliza un convertidor para transformar la tensión hasta el nivel necesario y suministrarla a los componentes eléctricos del coche.

En resumidas cuentas con el Mazda CX-30 nos encontramos ante una opción muy equilibrada y a tener en cuenta para todos aquellos que busquen un vehículo con aspecto moderno y deportivo, de reducidas dimensiones exteriores pero con una gran habitabilidad y confort interior, un diseño minimalista pero sin renunciar a un amplio nivel de equipamiento, y una motorización de gasolina híbrida que ofrece unas más que aceptables prestaciones en orden de marcha.

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