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Motores de cinco cilindros de Audi

Los potentes motores de cinco cilindros tienen una larga tradición en Audi. Durante la década de los ’80 se utilizaron en los coches de rally de Audi, en los coches del campeonato de turismos y en modelos de producción. El primer modelo RS, el Audi RS 2 de 1994, también equipaba un motor de este tipo. El cinco cilindros reapareció en la gama Audi en 2009 en el Audi TT RS; posteriormente se utilizó en el RS 3 Sportback en 2011, y dos años más tarde se montó también en el Audi RS Q3. El TFSI de 2,5 litros ha sido elegido «Motor del Año» en su categoría cinco veces consecutivas desde 2010.

Con una cilindrada de 2.480 cc, el motor de cinco cilindros rinde una potencia máxima de 367 CV, lo que supone una notable potencia específica de 148 CV por cada litro de cilindrada. El par máximo de 465 Nm ya está disponible a sólo 1.650 rpm, y se mantiene constante hasta las 5.550 rpm. El sprint de 60 a 100 km/h en cuarta velocidad se cubre en apenas 4,1 segundos, y sólo tarda 5,8 segundos en pasar de 80 a 120 km/h en quinta velocidad.

Con apenas 49 centímetros de longitud, el cinco cilindros es un motor muy corto. Su peso es de aproximadamente 180 kilogramos. El cárter está realizado en fundición de grafito, un material extremadamente fuerte pero ligero. Una serie de refuerzos estratégicamente situados mejoran la resistencia del bloque. El 2.5 TFSI se ensambla a mano en la planta de motores de Audi en Györ, Hungría, por parte de un equipo de expertos con formación específica.

El turbocompresor, que desarrolla una presión de carga de hasta 1,3 bares, tiene un rendimiento teórico de 1.100 kilogramos de aire por hora. Un intercambiador de calor reduce la temperatura del aire una vez comprimido. La combinación de la turboalimentación con la inyección directa de combustible permite una elevada relación de compresión de 10,0:1, lo que permite una mayor eficiencia. Una serie de mariposas en el colector de admisión provocan un movimiento de rotación en la corriente de aire, y los árboles de levas, con un ajuste de 42 grados, optimizan aún más la mezcla.

 

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